NUESTRO PROCESO

A través del ritual de nuestros ancestros, buscamos ofrecer algo fuera de lo común y conquistar el paladar del mundo.

PONEMOS CORAZÓN A NUESTRO TRABAJO PARA DAR COMIENZO A ESTA MAGIA 100% NATURAL LLAMADA:

"MEZCAL"

El Maestro Mezcalero Juan Óscar Vázquez Cruz se encarga de todo este proceso.

SIEMBRA

El cuidado de todas las crías está lleno de dedicación.

Cada una de ellas reciben el mismo amor y acompañamiento.

SELECCIÓN Y JIMA

La parte final del maguey es el comienzo del mezcal. Esperamos hasta 8 años para empezar con este proceso. Hacemos una selección minuciosa de piñas, con base en la experiencia de los jimadores y la reducción de agentes dañinos. La calidad de nuestro mezcal parte de los azúcares de la planta.

Cortamos el maguey y lo trasladamos a Paraje El Río Grande.

COCCIÓN

Antes de hornear, el Maestro anuncia el comienzo de la cocina. Sirven una prueba de mezcal que avientan al fuego. Lo toma el Maestro y todos los participantes de la cocción. Después el Maestro entra al horno y ahuyenta a los espíritus con una rama de espina que puedan interferir en la cocción del maguey.
Nuestro horno cónico (enterrado y forrado de cantera rosa) brinda un toque mineral. Acomodamos las piedras para garantizar la cocción uniforme de las piñas, hasta llegar al ahumado exacto. Se usa leña de Guanacaste.
Se impide la salida del humo para no causar combustión. Es necesario hacer guardia día

DESTAPA

Se cuida cada detalle para lograr la presencia de los minerales y los tonos ahumados.
Se enfría por 24 horas. El olor a maguey cocido invade los alrededores, es una experiencia sensorial indescriptible

MOLIENDA

La tahona de nuestro molino está hecha con piedras de río, por ello libera minerales perceptibles al paladar.
Estamos en contra del malatrato animal, así que optamos por técnicas mecánicas en este proceso.

FERMENTACIÓN

Recolectamos el producto macerado en tinas de madera. Después se agrega agua caliente y empieza su proceso de fermentación 100% natural, durante 18 o hasta 25 días. No usamos acelerantes químicos.

DESTILACIÓN

DOBLE Y TRIPLE

Cuando la mezcla alcanza el grado de azucar adecuado se procesa en alambiques de cobre.
El primer destilado es de 20 horas. Por su parte, el resaque es de hasta 24 horas.
El Maestro Mezcalero da el último toque para definir sus notas finales. Se destila varias veces para concentrar todos los tonos que componen a la bebida y lograr que sea una experiencia refinada. Algunas de nuestras variaciones llegan a 47° Alc. Vol.

Nuestro mezcal es totalmente fuera de lo común.

Buscamos destilar la esencia pura del maguey, nunca aceleramos el proceso.

 Aquí está el resultado de horas esperando hasta la última gota del espíritu del maguey.

¿Eres Mayor de edad?